Japón
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, ha mantenido en las últimas horas conversaciones con los líderes de Arabia Saudí, Catar, Emiratos Árabes Unidos y Jordania en busca de cooperación para contribuir a mejorar la situación humanitaria en la Franja de Gaza y lograr una desescalada del conflicto con Israel.
Kishida comenzó su ronda de conversaciones, que se extendieron hasta la tarde-noche del miércoles, con el príncipe heredero saudí Mohamed bin Salmán, al que le transmitió su «profunda preocupación» por los recientes acontecimientos en Israel y Palestina, según detalló el Ministerio de Exteriores japonés en un comunicado.
Japón ha condenado de forma contundente los recientes ataques terroristas del brazo armado de Hamás y otras milicias palestinas, especialmente los ataques y secuestros de civiles, y se ha sumado a las condenas por el ataque del martes al Hospital Al-Ahli de Gaza que ha dejado cerca de medio millar de muertos.
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Es la mayor masacre en el enclave de las cinco guerras que ha habido entre las milicias palestinas de Gaza e Israel desde 2008.
Tokio «busca coordinarse (con otros países) para garantizar la seguridad de los civiles y calmar la situación lo antes posible», le transmitió Kishida a Bin Salmán, según la cancillería japonesa.
Kishida agradeció a los líderes los «esfuerzos diplomáticos» de estos países para la calmar la situación y logró su compromiso para seguir colaborando en la evacuación de japoneses y otros nacionales extranjeros de los territorios en conflicto, así como para lograr la liberación de rehenes y prevenir una escalada de tensión aún mayor.
La conversación de Kishida con los líderes de la región sigue al llamamiento que la ministra japonesa de Exteriores, Yoko Kamikawa, realizó a su homólogo iraní, Hossein Amir Abdollahian, para que su país se involucre en los esfuerzos por reducir la escalada del conflicto entre Israel y Palestina.
Japón ha anunciado que destinará 10 millones de dólares en ayuda humanitaria de emergencia para la población civil de la Franja de Gaza a través de agencias internacionales para contribuir a hacer frente a la crisis derivada de los enfrentamientos. EFE
